viernes, 21 de mayo de 2010

MUJERES EN UN RINCON

Cuando las mujeres no podemos tener un rol activo y decisivo en nuestras vidas, cuando el miedo nos limita, nos acorrala, no nos deja respirar y estamos presas de un encierro, de pérdida de libertad, DE DECISIÓN. A veces por que otras personas dirigen nuestra vida, por que no somos capaces de tomar el mango de nosotras mismas, por falta de confianza, alguien se apropia de la dirección y el curso de nuestra vida.

Hay hombres que mandan a las mujeres a un rincón, aquellos que necesitan ser superiores através del maltrato físico y psicológico, muchas veces solapado y sutil, que destruyen la autoestima de la mujer inabilitándola para reaccionar y defenderse, protegiéndose de manera adecuada.

Aquellos que no toleran el libre pensamiento, aquellos que no pueden dejar de pensar en sí mismos y en cubrir sus propias necesidades, sin importarles ni siquiera por averiguar cuales son las de la mujer que tienen al lado.

Aquellos que humillan y denigran los pensamientos y sentimientos, que hablan y piensan y deciden por la mujer.

Aquellos que se manejan con las mujeres cómo objetos utilitarios.

Si te sentís en un rincón. Sabé que no hiciste nada malo para permanecer en ese lugar y que tenés que salir, por que mereces ocupar otro espacio.

Hombres con estas características, destruyen la autoestima y cuando eso pasa la mujer corre el riesgo de QUEDAR PRESA, ATRAPADA, ARRINCONADA.

martes, 4 de mayo de 2010

LA TENSION DE LA VIDA MODERNA

Estamos exijidos a vivir completamente pendientes del exterior, de una realidad que nos supera, debemos estar pensando constantemente en buscar soluciones a problemas que se acumulan cada vez con mayor rapidez. Esto produce una tensión en nuestro cuerpo y en nuestra mente. Y lo mas lamentable de todo es que entramos en un estado de descentramiento de nosotros mismos. Perdemos la noción de nosotros mismos y nos encontramos absorbidos en este torbellino de actividad. Donde nos olvidamos, nos ignoramos e incluso en el peor de los casos nos desconocemos a nosotros mismos.

Nos decimos constantemente que NO TENEMOS TIEMPO es cierto que no tenemos tiempo, pero también es cierto que TENEMOS TODO EL TIEMPO y va depender siempre de la valoración que le demos a las cosas.

Cuando nos movemos en el mundo inconscientes de nuestra realidad interna, espiritual... y nos evadimos diciendónos NO TENGO TIEMPO esta objeción es ya un síntoma de estar descentrados.

Cuando estamos descentrados y nos surgen los problemas de diversa índole. Nos encuentran indefensos y los esfuerzos se agotan prematuramente, muchas veces nuestra salud física y mental se resiente, y entramos en un estado de confusión sin encontrar la manera de enfrentar las dificultades; por que no tenemos la suficiente fortaleza de espíritu, que es lo único que puede orientarnos y guiarnos a la hora de encontrar soluciones y enfrentar las cosas de la vida.